Ante
las elecciones europeas, Juntos por España no ha presentado en esta ocasión su candidatura,
no porque no dispusiéramos de las condiciones necesarias, pues a pesar de no
tener una estructura solida en todo el territorio nacional, si que podíamos
haber sorteado las trabas burocráticas para ello, pero estuvimos tanteando
distintas posibilidades de presentarnos, incluso con una candidatura encabezada
por una exdiputada nacional, que declino de manera cariñosa y muy amable
nuestra oferta. Por ello, si bien, consideramos que ninguna de las candidaturas
representa en modo alguno nuestras ideas, ya que todas parten de un sectarismo
ideológico que no aboga por el interés de los ciudadanos, sino exclusivamente
por sus intereses partidistas, creemos oportuno recordar a nuestros afiliados,
amigos y simpatizantes, así como al resto de electores, que nuestra
organización respeta el derecho al voto, el cual debe ser libre, igual,
universal, directo y secreto. Dicho lo anterior, queremos aportar algunas
consideraciones a los españoles. No nos une nada con la Unión Europea del
neoliberalismo, los burócratas, los mercaderes y de la guerra a la que nos
están llevando. Nuestra visión es muy diferente y propugnamos una Europa Social
y de las Patrias. Por ello, pensamos que solo se pueden valorar tres ideas
fundamentales para apoyar alguna candidatura, como son, la salida del euro, de
la UE y de la OTAN. Por tanto, solo los falangistas y los comunistas no
integrados en Sumar, proponen un cambio claro, radical y directo ante las
elecciones al Parlamento Europeo, aunque ciertamente las encuestas no indiquen
posibilidad alguna de conseguir algún escaño crítico con el Sistema. También, se
debe valorar muy bien que tanto el PP como el PSOE, coinciden en la mayoría de
las políticas de la UE y en las votaciones en el europarlamento. Respecto al
partido de Abascal, consideramos que Vox es un engaño y un fraude: pues solo
quieren que pisar moqueta y tener sillones, es decir, ahora quieren aquello que
antes parecían desear suprimir y además solo hacen que desestabilizar, pero sin
aportar nada positivo a la convivencia, pues se debe ser rebelde, pero con
sentido común y no diciendo tonterías y payasadas, que en algunos aspectos,
producen autentica vergüenza ajena escuchar sus propuestas y la de sus socios y
amigos Milei, Trump y Bolsonaro, que solo defienden que los intereses
económicos de los más ricos y poderosos del mundo. Y nosotros, no lo hacemos.