Si bien es cierto, que por un lado aplaudimos el reciente
acuerdo entre el PP y el PSOE para renovar algunos órganos constitucionales,
como son el Defensor del Pueblo, el Tribunal Constitucional, la Agencia de
Protección de Datos y el Tribunal de Cuentas, pues el acuerdo parece que viene
a rebajar la tensión entre el gobierno y la oposición, tenemos, sin embargo,
que manifestar que nuestra propuesta va en un sentido contrario a que sean los
partidos y los políticos, los que en despachos a puerta cerrada, se repartan
los puestos en órganos constitucionales, en especial en el Poder Judicial, y
que deberían estar en manos de profesionales independientes de reconocido
prestigio, que lo hay sin militancia política. Dicho esto, la elección de Ángel
Gabilondo como Defensor del Pueblo y de Teresa Jimenez- Becerril como número 2,
nos parece aceptable, pues son dos personas de carácter moderado, para una
institución de gran importancia y que además debería tener mayor eco en las
instituciones, aunque de nuevo insistimos en que la elección del Defensor del
Pueblo y del resto de órganos constitucionales, deberían de tener otros
mecanismos distintos y distantes de los partidos políticos. Juntos por España
entiende que tenemos que proteger en especial, a los jueces de los políticos,
por eso mismo los jueces deben ser gobernados y elegidos por jueces imparciales
e independientes y no por jueces puestos a dedo mediante pactos en despachos,
por los partidos políticos, bien sean de izquierda o derechas. Por otro lado, no
entendemos que un juez o algunas otras profesiones que deben ser independientes
e imparciales en su actividad profesional, puedan entrar en la política y luego
vuelvan a ocupar su puesto en la carrera judicial o en su destino, sin más,
pues al menos, deberían pasar un tiempo en otra actividad profesional distinta.
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